Espeluznante ruta de trekking a los Nacientes de Marcos y Cordero y al espectáculo jurásico de la laurisilva en el bosque de Los Tilos. Sin duda, una de las mejores rutas que se pueden hacer en La Isla Bonita. Todo un clásico para los amantes de La Palma.

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Los túneles que nacen del agua…

Información del Recorrido

• Duración: 5 horas (02 de enero)
  
• Zonas Visitadas: Bosque de Los Tilos, Casa del Monte, Naciente de Marcos, Naciente de Cordero, Barranco del Agua, Los 13 Túneles, Cascada de Los Tilos
• Kilómetros Recorridos: 18 kilómetros (recorrido no circular)
• Desnivel Total Acumulado: 120 metros de subida y 1000 metros de bajada
• Puntos de Altitud Máxima y Mínima: 1420 m / 490 m

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Resumen de la Ruta

El recorrido de los Nacientes de Marcos y Cordero sigue el sendero PR LP 6 de la Isla de La Palma en el Archipiélago de Islas Canarias.

La ruta se puede realizar de tres formas diferentes:

1. Empezar desde Los Tilos subiendo por un sendero y enlazando con el barranco que lleva hasta el Naciente de Cordero, bajar suavemente hasta el Naciente de Marcos y cruzar los 13 túneles del canal de agua hasta Casa del Monte. Desde aquí, se desciende por una pista hasta Las Lomadas y, por último, habría que remontar por la carretera unos 5 kilómetros hasta los Tilos. Esta opción también se podría hacer en sentido inverso.
2. Reservar plaza en uno de los taxis que salen de la pequeña caseta forestal de Los Tilos y, pagando 15 € por persona, suben por la pista desde Las Lomadas hasta Casa del Monte. Aquí se inicia el sendero siguiendo el canal de agua atravesando los 13 túneles hasta los Nacientes de Marcos y Cordero para, finalmente, descender por el barranco hasta la caseta forestal de Los Tilos.
3. Subir en el taxi hasta Casa del Monte y realizar simplemente el recorrido de los 13 túneles y los Nacientes de Marcos y Cordero, y regresar de nuevo a Casa del Monte para volver a bajar en uno de los taxis (unos 10 km de longitud y aproximadamente 100 metros de desnivel de ascenso y descenso).

OJO: no se puede acceder en vehículo privado a Casa del Monte, está prohibido. Es una pista de tierra estrecha y cerrada al tráfico particular porque los taxis oficiales y minibuses tienen que coordinar sus subidas y bajadas por la imposibilidad de que coincidan dos vehículos a la vez en direcciones opuestas.

Además, no recomendaría a nadie que le tenga cariño a las ruedas de su coche meterse ahí… ¡menudos botes y pedrolos!

Yo elegí la segunda opción: subí en taxi hasta Casa del Monte y realicé el recorrido empezando por el canal de agua y los 13 túneles hasta los nacientes, para después descender por el barranco hasta la pequeña caseta forestal de Los Tilos.

Por último, completé la ruta con la visita a la estupenda Cascada de Los Tilos, muy cerca de donde termina el recorrido de Los Nacientes de Marcos y Cordero.

Hay que tener en cuenta que el desnivel es, principalmente, de descenso y aunque no se puede clasificar como una ruta difícil, sí que lo empinado de alguna bajada y el terreno (atravesando zona de roca y bloques) hacen que se tire bastante de pierna, rodilla y articulaciones.

A mí personalmente me ha fascinado por lo recóndito de su ubicación y lo variados que son sus tramos y paisajes, pasando por…

• Los famosos túneles, algunos muy cortos… ¡pero otro muy largos! Imprescindible llevar un buen frontal con pilas (que no os pase como a mí… que se agotaron en el primer túnel y tuve que recurrir al móvil… jajaja)

• El canal que recoge el agua de los nacederos y la baja hasta la zona de Barlovento. Los 4-5 primeros kilómetros de la ruta van acompañados continuamente de la pureza y sonido del correr del agua.

• Las espectaculares vistas del barranco desde numerosos puntos y miradores.

• La zona de la laurisilva. Isla Nublar de Jurassic Park está definitivamente en La Palma.

• La visita final a la Cascada de Los Tilos. Entorno relajante e ideal para desconectar un rato y reponer fuerzas rodeados de la naturaleza más pura y salvaje.

Pero veamos cómo recorrer la archifamosa ruta de los Nacientes de Marcos y Cordero poco a poco…

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El Itinerario Paso a Paso

Para llegar al punto de inicio, se venga de donde se venga, hay que conducir por la carretera LP-1 hasta la zona de San Andrés y Sauces (San Andrés y Los Sauces). Ahí, cerca del gran Puente de Los Sauces, tomaremos el desvío de Los Tilos para continuar primero por la carretera LP-31 y después por la LP-105 hasta la pequeña caseta forestal situada unos 500 metros antes del Centro de Visitantes de Los Tilos.

Aquí, si tenemos suerte, podemos entretenernos dándole de comer al amigable cuervo Venancio, uno de los múltiples cuervos ya famosos de diferentes zonas naturales de la isla y que están totalmente acostumbrados al contacto con los humanos.

Desde esta caseta se tarda aproximadamente una hora en taxi en llegar a Casa del Monte por una tortuosa pista forestal que realmente parece solo apta para 4×4… ¡Quien se maree fácilmente mejor que no coma nada un buen rato antes!

Al final del movidito viaje, estaremos en el lugar conocido como Casa de Monte. Varios paneles informativos nos introducen de lleno en la historia de la ruta y nos indican el camino a seguir (continuando la canalización del agua hacia la izquierda). Desde aquí, es imposible perderse hasta el final, ya que el sendero está perfectamente delimitado y hay varias indicaciones por el camino cuando hay riesgo de pequeñas dudas.

Estamos a unos 1340 metros de altitud. Empezamos a caminar…

Yo hice la ruta solo. Tenía esperanzas de poder unirme a alguna de las personas con las que compartí taxi, pero resultaron ser todos alemanes «idioten» que, una vez más, solo se dignaron a hablar conmigo cuando tenían dudas que el conductor del taxi no les podía contestar porque solo hablaba castellano. Y siento la expresión, pero no pensaba que después de la horrible experiencia con los no-compañeros también alemanes que tuve en Laponia hace unos meses iba a ocurrir lo mismo tan pronto (parece ser que hay 18 vuelos directos a la semana de Alemania a La Palma… ¡OJO que se la quieren quedar!)

Así que al llegar a Casa del Monte los mandé a paseo y me puse a caminar a buen ritmo (completé la ruta en 3 horas y media) para ir mejor solo que mal acompañado.

Este canal de agua por el que discurre el inicio de la ruta viene de los nacientes y baja hasta la Central Hidroeléctrica del Mulato que es la única que aún funciona en Canarias.

Para canalizar este agua, parece ser que unos tal Marcos y Cordero (uno ingeniero y el otro inversor) programaron hace ya más de 100 años una ambiciosa obra para perforar la roca y construir el canal, algo bastante impresionante para los medios de la época.

Entre el inicio de la ruta y el Naciente de Cordero pasaremos por estos 13 túneles cuyas longitudes varían entre los 12 y los 347 metros de longitud.

Algunos de ellos tienen unas grandes aberturas en sus puntos medios por las que podemos disfrutar de unas maravillosas vistas del barranco. En concreto, en el camino entre los túneles número 9 y 10, podremos ver (y oír) a lo lejos el Naciente de Marcos, que surge de las entrañas de la montaña.

El túnel más divertido es el túnel número 12, justo antes de llegar al Naciente de Marcos. Ya la entrada es completamente diferente a las demás. En todos los túneles el agua está perfectamente canalizada por el lado izquierdo y podemos caminar por el lado derecho, pero en este… ¡Agua por doquier!

Esta perforación atraviesa una cortina de agua, por lo que es bastante aconsejable llevar un buen chubasquero ya que, literalmente, llueve dentro del túnel.

Y al salir de este túnel nos plantamos al fin en el Naciente de Marcos, el más importante de La Palma (y también de Las Canarias, ya que en todo el archipiélago no existen ríos verdaderos). Vemos como los chorros bajan por la ladera y entran en el canal.

Pasamos por delante del naciente y preparamos las piernas para una corta pero empinada subida. Estamos ahora en el punto más elevado de la ruta. Es obligatorio detenerse y mirar hacia atrás: Marcos, el Barranco y el Túnel 12 se fusionan en una misma imagen.

Seguimos caminando un poco más para cruzar el último túnel, el número 13, y llegar al Naciente de Cordero, formado por tres pequeñas cascadas que inician el canal que recoge el agua de los dos nacientes y que la lleva hasta las casas y regadíos de la isla.

Ahora comienza el descenso, con un primer tramo bastante empinado y técnico en el que debemos ir con relativo cuidado.

Poco a poco el pinar empieza a mezclarse con la laurisilva, apareciendo impresionantes helechos que alcanzan sin ningún esfuerzo longitudes de 2 metros o más.

Pronto cruzamos un bonito puente de madera que nos lleva a una abertura en el bosque conocida como El Mirador de Los Espejos, que conforma la verdadera frontera entre el Monteverde y el Pinar. Aquí se unifican las cuencas de Marcos y Cordero que pasan a tomar el nombre de Barranco del Agua.

El valor botánico de los bosques de laurisilva es muy destacado porque Canarias es uno de sus últimos refugios. Hace 65 millones de años cubrían toda la cuenca mediterránea pero los drásticos cambios climáticos llegaron casi a extinguirlos.

Continuamos para adentrarnos de nuevo en un espeso y frondoso bosque que casi no deja ni pasar la luz. De nuevo me siento en un verdadero Parque Jurásico. Caminar tranquilo y sin otra presencia humana por estos bosques es una experiencia verdaderamente única.

Tras otra media hora entramos ya en el tramo final del descenso y nos encontramos con un pequeño desvío que sube ligeramente para llegar al Mirador del Espigón Atravesado. Subimos unas estrechas escaleras rústicas para llegar a la vista de infarto de la ruta.

Ante nuestros ojos, la inmensidad. La Reserva de la Biosfera de Los Tiles está delante de nosotros, invitándonos a saltar y dejarnos caer sobre sus tupidos árboles. Impactante.

Volvemos al camino para seguir descendiendo por un tramo de bosque cubierto fundamentalmente por tiles hasta terminar en la pequeña caseta forestal del Bosque de Los Tilos, de donde había salido el taxi unas horas antes.

Si remontamos unos cientos de metros carretera arriba encontraremos un pequeño desvío a la izquierda en la última curva antes de llegar al Centro de Visitantes.

Seguimos este llano sendero que atraviesa unos pequeños túneles y discurre por un estrecho cañón en el que pocas veces dará la luz directa del sol, plagado nuevamente de macro-helechos nunca vistos antes por mí.

Pocos minutos después empezaremos a oír el sonido del agua y, tras una última curva, nos plantaremos justo delante de la estampa de la formidable Cascada de Los Tilos.

Si nos acercamos, veremos que se puede subir un poco por el borde derecho del cañón para acercarnos más a este precioso salto de agua, único en la isla. Desde aquí nos aseguraremos de que ningún Tiranosaurio Rex ni ninguna manada de Velocirraptores estén al acecho.

Y así se termina este increíble viaje por las alturas y las espesuras de la reserva de Los Tilos. Parece mentira que en una isla tan pequeña se pueda pasar de la vegetación extrema de esta zona al paraje negro y lunar de los volcanes de la zona centro-sur.

La Palma es un tesoro natural muy bien guardado que debemos preservar y conservar realizando rutas siguiendo siempre los senderos establecidos y cuidando y respetando el entorno y el medio ambiente.

No te pierdas La Isla Bonita, ¡te está esperando!