La variedad de rutas en São Miguel es apabullante (para el tamaño de la isla) así que es importante hacer una buena selección en función de lo que se busque. Aunque a muchos de los sitios más bonitos e impactantes se puede llegar en coche o con un simple paseo, vale la pena machacar un poco las piernas para adentrarse en la verdadera jungla de la isla y dejarse llevar por su naturaleza, sus sonidos y sus imágenes.
Azores 2017 – São Miguel (II): Del Té Verde al Todo Verde
